Por no mostrar la autorización de impacto ambiental de la Semarnat, inspectores de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) de Yucatán impusieron la clausura total temporal del Poseidón ubicado en la playa “El Playón”.
Y es que, con la llegada del huracán Beryl al territorio mexicano, internautas de diferentes estados del país comenzaron a realizar ataques al Poseidón de Yucatán en redes sociales, llegando al grado de querer derribar la estatua por haber “enfurecido” al dios maya de la lluvia Chaac.