Por ROBERTO MELENDEZ S.
Considerada como uno de los “puntos más atractivos” de la Zona Rosa, personal de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México “rescataron” la Glorieta de los Insurgentes, de la que fueron retirados, con absoluto respeto a sus derechos humanos, decenas de personas en situación de calle y comerciantes ambulantes, entre quienes se había infiltrado generadores de violencia e ilícitos.
De acuerdo a las autoridades policiales y las secretarías de Obras y Servicios, Bienestar y Gobierno de la capital del país, de la zona, donde se realizan obras para la modernización de la Línea Uno del Sistema de Transporte Colectivo Metro, fueron retirados campamentos en los que sobrevivían personas vulnerables, entre ellas de grupos étnicos que se habían establecido en el lugar por no tener un lugar fijo para trabajar y vivir.