La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia, al resolver un amparo en revisión, emitió dos jurisprudencias, en las que estableció que dentro del concepto de residuos peligrosos biológico-infecciosos encuadran las jeringas empleadas para el suministro de drogas inyectables, debido al peligro que representa su manejo por su naturaleza de objetos punzantes y por el riesgo de transmisión de enfermedades ante la presencia de fluidos corporales. En su gestión y manejo deben intervenir los municipios en coordinación con otros órdenes de gobierno.
SCJN pide a estados control sobre recolección de residuos biológico-infecciosos
