“Violeta, una joven clarinetista trans de 18 años, comienza a cuestionar su vida al escuchar el eufonio; este encuentro con el instrumento no solo cuestiona su expresión musical, sino también su identidad de género”, así lo refiere Amanda, estudiante de la Escuela de Artes Escénicas de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), integrante de la casa productora Artenema y directora del corto de ficción “Eufonio para Violeta”.
La narrativa del cortometraje se construye a través de una metáfora. Desde su infancia, Violeta se acerca a la música a través de instrumentos musicales de viento, pero a los 18 años, segura que toda su vida tocaría el clarinete, escucha a una persona interpretando el eufonio; ahí reconoce el sonido que toda su vida había escuchado dentro de ella y es a partir de este encuentro cuando comienza su crisis de identidad y comienza a cuestionarse quién es.
Amanda explicó que este cortometraje narra la historia de cómo es que las personas trans descubren su identidad de género, por medio de la relación que Violeta tiene con su instrumento, como una nueva propuesta de ver lo trans desde la vivencia de las personas trans.
“Desde los estudios cinematográficos, la parte que a mí más me interesa es la de la representación, ya que las identidades trans es muy hablado y noticiado. El punto de hacer nuevas propuestas es una respuesta a lo que ya existe de lo trans en cine, que son muy arquetípicas y tienen que ver con la transición médica, generando un sesgo en la imagen cultural de una persona trans”, abundó.
Asimismo, destacó que este corto narra el inicio de la transición rompiendo el estereotipo de que esta comienza cuando una persona decide empezar con un tratamiento hormonal o con operaciones, sin embargo; narra el inicio de la exploración del sentimiento de ser otra persona en un cuerpo distinto.
“Esta historia yo la escribí desde mi experiencia personal, el hecho de que Violeta escuche otro instrumento hasta que ella no lo conoce, es una representación de cómo las personas niegan su identidad porque nos han dicho que no debemos de sentirnos diferentes de nuestro cuerpo”, afirmó.
La música y la danza en Eufonio para Violeta es una parte muy importante dentro de la cinta, ya que el espacio se transforma, en este sentido, la propuesta es que las artes escénicas sean agentes de cambio y representen al género como algo dinámico, por lo que el descubrimiento de Violeta como mujer trans va más allá de cómo se viste o se representa, sino como un ser en movimiento para explicar el descubrimiento interno de las personas trans.
Al respecto, el productor Leonardo Cassiel Hernández Valdespino, destacó que esta producción es el primer cortometraje de ficción dirigido y producido por mujeres trans y es una conjunción de artes escénicas en la pantalla grande.
“Es una historia que vale la pena para contar a través del cine, la música y la danza, ya que es la historia de una mujer trans que está permeada por las artes escénicas y forman parte de su descubrimiento y es por ello que el equipo está conformado por alumnado de estas disciplinas”, expresó.
En este sentido, Hernández Valdespino destacó que existe una gran producción de documentales y reportajes en videos de activistas dentro de la entidad mexiquense sobre las personas trans, sin embargo; la ficción es un espacio que no ha explorado esta temática por lo que es necesario generar estas narrativas diversas, equitativas y desde el respeto en la ficción.
Finalmente, Amanda y Leonardo Hernández invitaron a la comunidad universitaria y al público en general a conocer el trabajo que Artenema realiza como casa productora para conocer más sobre Eufonio para Violeta.
Para conocer este y otros trabajos de Artenema, las y los interesados pueden dirigirse al sitio: https://www.indiegogo.com/projects/eufonio-para-violeta#/