A cuatro días de que “Helene” tocó tierra cerca de Tallahassee, capital del estado de Florida, como huracán de categoría 4 en una escala de 5, con vientos de 225 km/h, su fuerza devastadora sigue causando estragos incluso después de debilitarse a ciclón postropical.
Al menos 22 personas han muerto en Carolina del Sur, 17 en Georgia, 11 en Florida, dos en Carolina del Norte y una en Virginia, según un balance elaborado por las autoridades correspondientes y una vez que se ha hecho el recuento de los daños materiales y humamos que “Helene” ha dejado a su paso.