La presidenta Claudia Sheinbaum, ha formalizado la extinción de varios órganos autónomos, incluyendo el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT). Esta medida implica la transferencia de sus funciones a diversas secretarías gubernamentales.
La reforma constitucional que respalda esta decisión fue aprobada por el Congreso mexicano y requiere la ratificación de al menos 17 de las 32 legislaturas estatales para entrar en vigor. Dado que el partido gobernante, Morena, controla 24 congresos locales, se espera una rápida aprobación.
La eliminación de estos organismos ha generado críticas de la oposición, que argumenta que esta medida compromete la transparencia y la rendición de cuentas, al concentrar funciones clave en el Ejecutivo.
Además del INAI y el IFT, se eliminarán otros órganos como la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), la Comisión Reguladora de Energía (CRE), la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu).