El proyecto Calizas Industriales del Carmen (Calica) en Quintana Roo, ahora propiedad de Vulcan Materials, interesó al gobierno de Miguel de la Madrid Hurtado. Familiares de Pedro Joaquín Coldwell vendieron terrenos que poseían desde hacía décadas, facilitando así la construcción de una dársena (puerto marítimo) en Cozumel.
Inicialmente, el proyecto iba a establecerse entre la caleta de Xel-Há y la zona arqueológica de Tulum, pero Coldwell se opuso por el riesgo a los ríos subterráneos. El gobierno reubicó el proyecto al sur de Playa del Carmen, una zona ganadera ya deteriorada, ideal para un puerto de altura.