El Ejército mexicano arrebató, durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, un total de 28,159 armas de fuego ilegales a los grupos criminales, según datos oficiales obtenidos por la vía de la ley de acceso a la información, aunque al país entran todos los años unas 200,000, de acuerdo con diversas fuentes.
Las armas incautadas servirían para dotar a todas las Fuerzas Armadas de El Salvador, pero se quedan cortas ante las cientos de miles que ingresan de forma ilegal desde Estados Unidos cada año, según ha expuesto el Gobierno de México.
“Cada año son transportadas de manera ilegal más de 200,000 armas, diario unas 600 entran ilegalmente de Estados Unidos a México y esta dinámica tiene que ver con la brecha entre lo legal y lo ilegal, entre un mercado de armas libérrimo como el de Estados Unidos y uno muy restrictivo como el de México”