Por ROBERTO MELENDEZ S.
En incineración que podría calificarse como histórica, la Fiscalía General de la República incineró, en Yucatán, más de cuatro millones de cigarrillos falsificados que fueron ingresados ilegalmente al país y, además, ocasionan severos daños a la salud al ser consumidos. Las acciones se realizaron sin incidentes.
La institución dirigida por el fiscal general de la nación, Alejandro Gertz Manero, expuso que por medio de su Fiscalía Federal en el Estado de Yucatán, redujo a cenizas, además de los cigarros, diversos narcóticos y objetos del delito relacionados con diversas investigaciones.
Tras exponer que la quema se realizó en instalaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Representación Social de la Federación destacó que se destruyeron cuatro millones 22 mil 066 unidades de cigarros, 60 kilos 85 gramos 221 miligramos de marihuana y dos mil 600 plantas de esta misma sustancia,