Pese a los esfuerzos para combatirla por parte de legisladores y autoridades, la extorsión se ha convertido en una de las peores amenazas para los mexicanos, pues un estudio del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República se estima que, por cada 100 casos, en sólo dos se abre una carpeta de investigación.
La gran impunidad que prevalece para castigarla he permitido que esta actividad criminal se dispare en México hasta niveles insospechados, así lo revelan datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2022 del Inegi mostró que 17.5 por ciento el total de delitos ocurridos en nuestro país durante 2021 fueron actos de extorsión, con cerca de 5.4 millones de incidentes.