Más allá del impacto en sectores específicos, las políticas migratorias de Trump podrían reducir el crecimiento del producto interno bruto de EE.UU. entre 0,1 y 0,4 puntos porcentuales, o entre 30.000 millones y 110.000 millones de dólares en 2025, según un estudio del centro de pensamiento Brookings Institution.
A esto se le suma la presión por parte de industrias como la construcción y la agricultura, donde los trabajadores indocumentados forman un porcentaje importante de la mano de obra, que han comenzado a hacer sonar las alarmas sobre las consecuencias negativas que las deportaciones masivas tendrían sobre estos sectores.
Trump alcanzó la victoria apoyado en un agresivo mensaje antimigrante, con la promesa de deportar a los más de once millones de personas que viven sin un estatus legal en EE.UU. y frenar la llegada de migrantes y solicitantes de asilo a través de la frontera con México, con medidas como la construcción del muro prometido durante su primer mandato.