Por Karina A. Rocha Priego
Sí, es cierto que este proceso electoral se ha caracterizado por ser, desde el inicio, altamente violento, que haya habido diversos atentados contra candidatos y candidatas y que, por ello, otros tantos hayan perdido la vida, sin embargo, parece que esa situación ha sido tomada como pretexto para que “algunas candidatas” se victimicen y se quieran hacer notar por esa razón.
No quiere decir que no haya indicios de algún ataque contra otro u otra candidata, pero hay casos que pintan para ser “exhibicionistas” y quieren atraer la atención a como dé lugar. Hecho un tanto dramático si ustedes quieren verlo así, pero ahora resulta que todas las candidatas han sido víctimas de algún ataque, pero claro, hay quienes no pueden comprobarlo.
Tal es el triste caso de la candidata morenista de Valle de Bravo, Michelle Núñez -busca la reelección-, quien acusa a la alcaldesa en funciones, Magdalena Rodríguez, de amenazas, luego de mostrar una conversación con otra persona, lanzando precisamente una amenaza en su contra pues, supuestamente dicen “… así como mandó levantar a Zudikey, ahora le toca a ella”, por lo que la protegida del secretario general de Gobierno, Horacio Duarte, revira y asegura que “si me pasa algo, ya saben quien fue”.
Por supuesto que la alcaldesa en turno de Valle de Bravo, Magdalena Rodríguez, niega la acusación y asegura que es una cuenta falsa a través de la cual la quieren acusar de un hecho no cometido por ella.
Lo cierto, queridos lectores, que la reputación de Michelle Núñez Ponce no es nada buena; efectivamente, luego del “levantón” contra Zudikey, por cierto, otra vez su contrincante en aquel municipio, Núñez quedó “mal parada”, pero ¡bien protegida!, pues de una u otra manera, terminó robando la alcaldía a Zudikey.
Pero a ver, en lo que va del proceso electoral, en Valle de Bravo se han suscitado varios incidentes, muy penosos por cierto, acusando de ellos a la propia Michelle Núñez, como que el pasado 16 de mayo, varios servidores públicos del ayuntamiento sacaron del Palacio Municipal, con lujo de violencia, al recientemente nombrado como director jurídico del ayuntamiento vallesano, Mario Guadarrama. Dicen, la autora intelectual de la agresión fue precisamente la alcaldesa con licencia y candidata a la reelección por Morena-PVEM-PT, Michelle Núñez.
El origen de la agresión contra el nuevo director jurídico de Valle de Bravo sería una ruptura entre la alcaldesa por ministerio de ley, Magdalena Rodríguez, y la alcaldesa con licencia, Michelle Núñez, quien a pesar de estar en campaña por la reelección sigue imponiendo su voluntad con puño de hierro, tal como ganó la alcaldía.
El comentario generalizado es que Michelle Núñez giró órdenes a sus incondicionales en el ayuntamiento para que cerraran las puertas de diversas oficinas con cadenas y candados para impedir que cualquier nuevo servidor público que nombre la alcaldesa en funciones no pueda entrar a sus oficinas. De hecho, la candidata de Morena habría dicho literalmente: “si se presentan los sacan a patadas, ya saben que a los que no obedezcan los corro cuando regrese”, dando muestras de indecencia, autoritarismo -como todos los morenistas que se sienten “hechos a mano”- cuando por algo el propio jefe del Ejecutivo Federal “les dice chairos”.
Lamentablemente, por temor o por dinero, esos pseudoservidores públicos cumplieron con la encomienda y perpetraron un acto de barbarie digno de las mentes más violentas e ignorantes a las que a todas luces no les importa nada más que cumplir con los perversos deseos de Michelle Núñez.
Pero, viendo las cosas fríamente, lo que le tienen esos pseudoservidores públicos a Michel Núñez es “miedo”, sabedores de que, presuntamente, fue capaz de casi mandar matar a Zudikey Rodríguez para arrebatarle la alcaldía, haciendo ver cuáles “son sus contactos” para cometer toda clase de bajezas y, con tal de no perder el empleo o de que “pierdan accidentalmente (sic) a un miembro de su familia”, pues mejor “obedecen”.
Por supuesto que, con este acto, queda claro que todo lo que representa Michelle Núñez es violencia, autoritarismo y represión, o sea, lo más nefasto y sucio de la política mexiquense. Las acciones ilegales y desestabilizadoras de Michelle Núñez han sobrepasado cualquier límite y, si el Gobierno del Estado de México no la detiene, las consecuencias para Valle de Bravo serán irreparables aunque, sabedores de su “relación” con el secretario general de Gobierno, esta mujer puede ser capaz de todo.
Después de todo esto, ¿quién le puede creer a Michelle Núñez que “alguien quiere hacerle daño”? Es puro exhibicionismo.
Desde luego que la actitud de la alcaldesa, hoy otra vez candidata, ha provocado que Valle de Bravo viva en la ingobernabilidad y en constante zozobra, pues la gente sabe que la consentida del secretario general de Gobierno es capaz de cualquier cosa para detener su caída en las preferencias del electorado vallesano y hoy, quiere volver a ganar ¡a la mala! -como acostumbra hacer todo-, si no es frenada -como un caballo- para evitar más desgracias en ese municipio y peor aún, se espera un zafarrancho el día de las elecciones porque Michelle quiere ¡arrebatar la alcaldía!, en lugar de ganarla limpiamente…
APLICA MELISSA VARGAS EL “TE LO FIRMO Y TE LO CUMPLO” DE PEÑA NIETO
Hablando de otra candidata, resulta que Melissa Vargas, candidata de la alianza “Fuerza y Corazón” por la alcaldía de Toluca, definitivamente la ha regado, ¡y feo! Parece que, en lugar de querer ganar, está dejando el campo libre a Morena pues, a esta se le ocurrió revivir el lema de campaña que en algún momento utilizó el tristemente célebre Enrique Peña Nieto, expresidente de México, al asegurar “… te lo firmo y te lo cumplo”, como si se tratara de “la voz del triunfo” cuando, en realidad, es de todos sabido que Peña Nieto ha sido uno de los presidentes más corruptos de México ¡y un vendido!, pues este, con tal de evitar la cárcel, entregó el país a Morena en charola de plata.
Peña Nieto, hay que decirlo, es el principal responsable de la debacle del PRI y del daño casi irreparable al país y, ¿lo utilizan de ejemplo? ¡Vaya cinismo!
Como ya lo han dicho, cualquier evocación de Enrique Peña, no puede más que hacer daño a una candidatura, no es un buen modelo, y dejó muchos sin sabores de los que los mexicanos no queremos más.
Toluca no es la excepción y usar su estilo de campaña no hace más que traer malos recuerdos, recuerdos que causan desaprobación de quien se identifica todavía con el gobierno que fue la gota que derramó el vaso y que dio paso a los gobiernos de Morena.
Si la intención es allanar el camino para que Morena triunfe en Toluca, entonces fue una buena decisión, si la intención es vencer a Morena en Toluca, fue la peor de todas. Por supuesto, habría que preguntar, ¿quién asesora a Melissa Vargas? ¿Acaso es el tristemente célebre Raymundo Martínez Carbajal? Porque si es así, lo único que está sembrando es rencor y una derrota anunciada que da pena ajena….