La idea del presidente estadounidense Donald Trump, de designar al fentanilo y sus precursores químicos como armas de destrucción masiva,podría abrir un nuevo frente no sólo contra los cárteles de la droga, sino con los países que abastecen y sirven de tránsito hacia México, alertó un reporte del Brookings Institution.
La designación presidencial, según el documento, permitirá al gobierno de Trump acusar a los miembros y financiadores de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG)bajo cargos de terrorismo con armas de destrucción masivas.
