El gobierno de Estados Unidos anunció que desde el 26 de diciembre de 2025 entrará en vigor una nueva regulación que establece la toma obligatoria de datos biométricos para todos los viajeros extranjeros al entrar y salir del país por aeropuertos, puertos terrestres y marítimos.
La medida, impulsada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y aplicada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), ampliará la recolección y verificación de datos biométricos —como fotografías faciales y otros identificadores— para no ciudadanos, incluidos turistas, estudiantes, trabajadores y titulares de residencias permanentes (Green Card).
