Durante el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador se estancaron los avances que México había logrado en el combate al hambre e incrementaron los casos de inseguridad alimentaria severa, reveló una investigación del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
En total, 8.8 por ciento de la población mexicana padece inseguridad alimentaria severa y 12.3 por ciento inseguridad alimentaria moderada, que juntos equivalen a 7.6 millones de hogares que reportan dificultades económicas para adquirir una alimentación suficiente en cantidad y calidad.
