Cárdenas Guillén es conocido como uno de los líderes y fundadores del Cártel del Golfo y creó Los Zetas, una banda criminal conocida por su violencia extrema, incluyendo torturas y asesinatos. Tras su liberación de prisión en Estados Unidos, Cárdenas fue puesto bajo custodia de ICE, a la espera de ser extraditado a México por cargos criminales.
Tras juicio en una corte de Estados Unidos, en el año de 2010, Cárdenas fue condenado a 25 años de prisión por liderar una red de narcotráfico que introdujo grandes cantidades de drogas en Estados Unidos, usando la violencia para lograr sus objetivos.
Cárdenas se declaró culpable de cinco delitos graves, incluyendo conspiración para traficar drogas, blanqueo de dinero y amenazas de asesinato a agentes federales.