Por ROBERTO MELENDEZ S.
Mientras la cifra de personas desaparecidas, al igual que el descubrimiento de fosas clandestinas en el país, la mayoría de ellas por colectivos de Madres Buscadoras, más de 70 mil cadáveres depositados en instituciones forenses y fosas comunes no han sido identificados debido, principalmente, a la falta personal capacitado, información genética y otros factores, lo que difícilmente es aceptado por las autoridades de los tres niveles de gobierno.
“La cifra de desaparecidos seguramente el mayor, ya que no pocas de las víctimas de este flagelo, como serían casos de migrantes centroamericanos, entre otros, no son reportados por sus familiares o bien desconocen el paradero de sus parientes, por lo que no acuden ante las autoridades para reportar el hecho, ya que estiman no serán atendidos”, puntualiza el penalista Enrique Fuentes Ladrón de Guevara.
