Por ROBERTO MELENDEZ S.
“No habrá represalias”, aseguró la gobernadora de Campeche, Layda Sansores San Román, al referirse a los policiales estatales que se mantienen en paros escalonados, pero se confirmó el cese de por lo menos nueve “canallas y corruptos” elementos de la corporación, a quien señala también como acosadores sexuales, corruptores y extorsionadores, sin presentar prueba alguna y mucho menos denuncias ante autoridades ministeriales. “No nos van a doblegar y de ello estén seguros”, ratifican los uniformados, algunos de ellos amenazados de muerte.
Mediante video difundido en Redes Sociales, Sansores San Román, quien sostiene que la mayoría de los policiales estatales le apoyan y que es una minoría los que desde hace días realizan paros en supuesta defensa de sus compañeras que fueron agredidas por internos en un motín registrado en el principal penal campechano, puntualiza: “He decidido enfrentarme a nueve canallas, corruptos que los amenazan a ustedes y que han sido denunciados por acosar mujeres, maltratar, corromper y extorsionar a la ciudadanía. Hemos iniciado el proceso de bajas y denuncia de sus delitos. Yo no vine sólo a ser Gobernadora, vine a combatir la corrupción, como lo ha hecho nuestro presidente”.
Ante la actuación de la gobernadora, a quien exigen la renuncia de la secretaria de seguridad, Marcela Muñoz, por ineficiente, prepotente y represora, además de responsabilizarla del ataque a las mujeres policías, los inconformes destacaron que varios de sus compañeros, a quienes relevarían en sus actividades, fueron privados de su libertad al impedirles egresar de las instalaciones de seguridad y “encerrarlos con candados”.
