
Desde tratamientos contra el VIH que salvan vidas hasta refugios para refugiados o alimentos para niños desnutridos, los proyectos de ayuda financiados por Estados Unidos en todo el mundo se están pausando, reduciendo o desechando debido a la congelación sin precedentes de casi toda la ayuda exterior por parte de la Administración Trump. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, emitió la semana pasada una orden ejecutiva que suspende la financiación de la ayuda al desarrollo de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) durante 90 días, tiempo durante el cual su administración revisará cuáles de los miles de proyectos humanitarios, de desarrollo y de seguridad seguirán recibiendo dinero.