
El gobierno de Estados Unidos, bajo órdenes del presidente Donald Trump, desplegó unidades militares en la frontera con México. Dos tanquetas de combate Stryker fueron instaladas en puntos estratégicos de El Paso, Texas, para vigilar los principales cruces fronterizos con Ciudad Juárez, Chihuahua. La Patrulla Fronteriza, encargada de la seguridad en la zona limítrofe, confirmó la llegada de los vehículos militares con el mensaje: “¡Misión lista!”. Estas unidades fueron enviadas con el objetivo de reforzar la vigilancia ante cruces ilegales y tráfico de drogas. Además del despliegue terrestre, un batallón de aviación de apoyo ha sido designado para monitorear la frontera desde el aire.