«Armaremos las unidades de combate con una variedad de drones estadounidenses de bajo costo», afirmó el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth.
El funcionario ha emitido nuevas y radicales órdenes para acelerar la producción y el despliegue de aviones no tripulados, permitiendo a los mandos adquirirlos y probarlos de forma independiente y exigiendo simulaciones de combate con aviones no tripulados en todas las ramas del ejército.
