
Paso mecánico a paso mecánico, decenas de robots humanoides corrieron en Beijing el primer medio maratón del mundo para androides, un símbolo de las ambiciones chinas en las nuevas tecnologías.
El evento organizado en la «E-Town», una zona de desarrollo tecnológico de la capital china, buscaba poner a prueba los límites de estas máquinas que, en un futuro, podrían asumir tareas de los humanos en la sociedad.
A lo largo de los 21 kilómetros del recorrido, se presenciaron algunos contratiempos. Un pequeño androide que al inicio se cayó al suelo consiguió ponerse de pie minutos después en medio de la aclamación del público. Otro, diseñado con aspecto de Transformer, se desvió de la trayectoria y chocó contra una barrera.