
De acuerdo con organizaciones estadunidenses, como Immigration Forum y American Immigration Council, una operación de deportación masiva de inmigrantes podría costar a los contribuyentes entre 150 mil y 315 mil millones de dólares, sin contar las pérdidas económicas que causaría la expulsión de población trabajadora.
Al arranque de su gobierno, Donald Trump ha prometido realizar el operativo de deportación masiva más grande de la historia estadunidense y con ello expulsar a más de 11 millones de indocumentados.
Para lograrlo, debería repatriar a 2.75 millones de personas al año, lo que significa casi el doble de los 1.5 millones que echó en los cuatro años de su primer mandato.