
El Informe Mundial sobre Drogas 2025 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) revela un aumento global del consumo del 28% en una década, con casi medio millón de muertes anuales y 28 millones de años de vida saludable perdidas por discapacidad y muertes prematuras.
El 40% de los años de vida saludable perdidos responden a los trastornos por uso de opioides, seguidas en un 28% de las enfermedades hepáticas crónicas, principalmente por hepatitis C. Son 14 millones de personas las que se inyectan drogas, de esas: 6,9 millones viven con hepatitis C; 1,7 millones con VIH y; 1,5 millones con ambas enfermedades.