Además de sus problemas de salud que, inclusive, merecieron una conferencia de prensa aclaratoria de su equipo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump hace esfuerzos denodados por olvidar el tema Epstein, éste se ha vuelto en su contra.
Hace unas semanas, el Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) publicó un informe en el que confirmó que Epstein se suicidó durante su breve reclusión, en circunstancias irregulares, y que no hay pruebas de que existiera una «lista de clientes» implicados en una red trata de menores, pese a las evidencias periodísticas.
