En un operativo coordinado entre diversas instituciones federales, autoridades mexicanas desarticularon una célula delictiva especializada en el tráfico de armas, que operaba en los estados de México, Jalisco y Nayarit. La acción fue encabezada por personal de la Secretaría de Marina (Semar) a través de la Armada de México, la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), en colaboración con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional (GN).
Durante los operativos simultáneos se llevaron a cabo 16 cateos y se cumplimentaron 10 órdenes de aprehensión, lo que permitió la detención de 14 personas vinculadas a la estructura delictiva. Entre los arrestados se encuentran siete operadores de primer nivel, quienes desempeñaban funciones como jefes de plaza y responsables de operaciones financieras y logísticas, así como tres individuos de segundo nivel, encargados principalmente de la compra, modificación y venta de armas. Además, fueron aseguradas cuatro personas más, incluyendo una que custodiaba una bodega con diversos artículos de armamento y equipo táctico.
