
La administración del presidente Donald Trump confirmó el pasada 22 de abril que dio mayores atribuciones al Ejército de Estados Unidos, permitiendo que los soldados detengan y registren a migrantes indocumentados en la frontera de Nuevo México.
A través de un comunicado, el Comando Norte de Estados Unidos informó que los efectivos de la Fuerza de Tarea Conjunta Frontera Sur ahora tienen autorización para implementar medidas de control en el Área de Defensa Nacional de Nuevo México, integrada a la instalación militar Fuerte Huachuca, en Arizona.