
En la cruzada arancelaria de Donald Trump, no sólo hay perdedores -consumidores y gobiernos, también hay ganadores: los grupos criminales están capitalizando el caos, pies cuanto más complejo y caro se vuelve el comercio legal, más atractivo resulta el canal ilegal.
El impacto excede lo económico. Con flujos ilícitos estimados en 3 billones de dólares en 2023, según cálculos de Naciones Unidas, los grupos criminales no solo mueven dinero. También capturan instituciones, distorsionan mercados y redefinen las reglas de juego.