El endurecimiento de las políticas antimigrantes implementadas por la administración de Donald Trump provocó un notable incremento en la preocupación de las comunidades migrantes en Estados Unidos.
Entre marzo y junio de este año, el temor a ser deportado —ya sea personalente o a través de familiares y amigos cercanos— aumentó 10 puntos porcentuales entre migrantes de todas las etnias y grupos sociales, al pasar de 33 a 43%.
